Todos los años la administración tributaria elabora un plan de control tributario.
Lo hace porque está obligada a elaborarlo por la Ley General Tributaria.
El plan de control tributario es reservado, pero eso no hace que no se publiquen las directrices principales del mismo en el BOE y sean accesibles desde la web de la Agencia Tributaria.
El objetivo del plan es establecer la base para las actuaciones de la administración tributaria, tanto como para incumplimientos menores como para el gran fraude.
El plan de control tributario 2015 pone énfasis sobre tres ejes principales: Internet, Internacional y Comercio minorista.
No obstante, también va a detenerse en algunos ejes en los que ha actuado siempre, como las actividades profesionales, los alquileres o los impuestos especiales.
Comercio Minorista
Se va a hacer hincapié en la tributación de los establecimientos de ventas al consumidor final, es decir, tiendas y restauración. Se quiere acabar con las técnicas que puedan suponer un fraude a la Administración Tributaria y competencia desleal.
Se harán auditorías informáticas con personal de la AEAT que verificará las aplicaciones y archivos informáticos. También se va a vigilar los sistemas informáticos de doble uso, que eliminen tickets, oculten parte de la información o que simplemente supriman parte de la facturación con el objetivo de pagar menos impuestos.
Por supuesto, como dicho antes, se van a seguir investigando temas que siempre se han investigado, como las actividades profesionales de alto valor y los sectores no afectados por la crisis económica cuyas empresas puedan estar disminuyendo los ingresos declarados.
Este plan ha sido criticado por algunos profesionales, como el sindicato Gestha que afirma que el plan es poco ambicioso y centrado en el pequeño fraude y por José María Peláez Martos que critica la falta de medios de la Administración Tributaria para conseguir sus objetivos.
Como todos sabemos, la AEAT mira por sus intereses, que son evitar el fraude fiscal todo lo posible. Puede que muchos de nosotros apenos tratemos con la misma una vez al año con la declaración del IRPF, pero eso no significa que no esté ahí con sus más de 25.000 funcionarios vigilantes que el año pasado hicieron casi 100.000 actuaciones.
Actuaciones de control en aquellos casos en que se aprecie la existencia de riesgos significativos de infradeclaración de la actividad.
Se analizará muy especialmente la posible utilización de programas informáticos (“software de doble uso”) que alteren la facturación real, remuneren tiques y modifiquen los precios o, simplemente, permitan suprimir una parte de la facturación. Especialmente se actuará en relación con contribuyentes que realizan ventas finales al público.
Se mantendrán actuaciones presenciales dirigidas a comprobar la efectividad del cumplimiento de la limitación de pagos en efectivo y se verificará in situ la situación censal de obligados tributarios respecto de los que existan indicios de deslocalización, o de simulación de actividad, para ocultar la verdadera actividad o el verdadero titular de la rentas.
Internet
Si hace tiempo hablamos de que la AEAT podría usar los datos de redes sociales para determinar las posibilidades de fraude tributario a través de los signos de riqueza que se puedan exhibir en las mismas, en este ejercicio, se van a activar ciertos controles sobre la tributación de actividades en Internet y comercio electrónico.
Está previsto cruzar los datos de 200.000 dominios de Internet para su incorporación a las bases de datos de la Agencia Tributaria.
También se va a controlar las actividades de comercio electrónico para determinar que dicha actividad tributa correctamente en España.
Asimismo, vigilará la cesión de viviendas total o parcial por Internet o mediante otras vías. Es decir, cuidado si no declaramos las rentas de esa vivienda que alquilamos, aunque sea por Internet sabrán que somos nosotros.
Internacional
Se va a poner especial atención en la residencia real de ciertos contribuyentes, para asegurarse de que si corresponde tributen en la jurisdicción correcta con comprobaciones in situ. También se va a poner énfasis en la declaración de bienes sujetos a tributación mediante el modelo 720.
Otro foco serán las localizaciones ficticias de las operaciones en paraísos fiscales y en las de residentes fiscales en España que puedan utilizar estructuras híbridas para disminuir su tributación en España.
En el área de Recaudación se reforzará la investigación de los casos de mayor complejidad probatoria en supuestos de derivaciones de responsabilidad de deudas pendientes, al objeto de combatir las operaciones de vaciamiento patrimonial de especial calado.
Como complemento a esta actuación de medidas cautelares para afianzar el cobro de las deudas, se reforzarán las investigaciones de movimientos financieros.
Igualmente, se agilizará la gestión de las deudas en fase de embargo y de aquellas afectadas por procesos concursales.