La empresa no tiene liquidez.
El gerente pide una cuenta de pérdidas y ganancias y, con sorpresa, ve que tiene beneficios.
Le dice a su asesor que no entiende cómo puede tener beneficios y no tener liquidez.
Antes de que el asesor pueda trasladar su análisis al empresario, este le pregunta ¿no tendré que pagar Impuesto sobre Sociedades?
Esta situación se da más a menudo de lo que debiera. En muchas ocasiones, las empresas se centran en su cifra de negocio, y minimizan la importancia de los recursos que emplean para conseguirla, sacrificando la tesorería en detrimento de los beneficios.
Aunque una empresa venda mucho y tenga un alto margen de beneficios, esto no significa que tenga que tener liquidez.
Eso sí, si vende mucho y su margen es insuficiente, sus días pueden estar contados. Es importante tener en consideración que muchas empresas mueren de éxito, al quedarse sin liquidez pero con beneficios en su cuenta de resultados.
La razón por la que esto ocurre es que la corriente de ingresos y gastos no tiene por qué coincidir con el flujo de entradas y salidas de dinero de la empresa.
Algunas razones por los que una empresa puede tener beneficios, pero encontrarse con problemas de liquidez serían las siguientes:
Diferencias en el tiempo entre la facturación y los cobros.
.- La facturación supone que se incremente la cifra de ventas de la cuenta de resultados, pero el cobro de las facturas en muchas ocasiones se dilata en el tiempo. Es importante agilizar al máximo el proceso de cobro, ya que cuanto antes se cobren las facturas, mejor será la liquidez de la empresa.
Para agilizar este proceso, es fundamental conseguir que las facturas se envíen cuanto antes a los clientes y, en el caso de que se produzcan retrasos en relación a la fecha de vencimiento de las facturas, iniciar cuanto antes el procedimiento de cobro.
Diferencias en el tiempo entre el registro de las facturas de proveedores y su pago
.- Cuando una factura se contabiliza, se refleja en la cuenta de resultados, pero este registro no tiene por qué coincidir con su pago.
Por otra parte, la compra de inmovilizados puede suponer una salida importante de tesorería, cuyo gasto no se reflejará íntegramente en la cuenta de resultados, al minorar este gasto las amortizaciones en varios ejercicios.
También se puede dar el caso de que se contabilicen pagos y las facturas no se contabilicen por no haberse recibido, por realizarse un pago anticipado o por error. En este caso, la tesorería disminuirá y no se reflejará el gasto, a no ser de que se realice un ajuste contable a fin de ejercicio.
Diferencias importantes entre el periodo de cobro y el de pago
Si se cobra mucho más tarde de lo que se paga, no se dispondrá de efectivo para afrontar los pagos, teniendo que recurrir al endeudamiento, si las entidades financieras lo conceden.
El pago de las liquidaciones tributarias
Las empresas están obligadas a realizar retenciones y a liquidar la diferencia entre el IVA repercutido y el IVA soportado, por lo que, a pesar de tener beneficios, pueden no tener liquidez para afrontar sus liquidaciones tributarias.
El pago de las devoluciones de los préstamos
Solo la parte de los gastos financieros se refleja en la cuenta de resultados; sin embargo, las cuotas de la devolución del capital de los préstamos pueden suponer importantes salidas de tesorería que mermen la liquidez de la empresa.
El pago de dividendos
La retribución de los accionistas también supone una salida de tesorería, que además no está recogida en la cuenta de resultados.
Comprar excesivas existencias para la rotación de la empresa
En ocasiones, las empresas adquieren excesivas existencias, buscando mejorar sus descuentos por volumen de compras o por excesivas previsiones de venta que no se materializan.
El robo interno o externo
La sustracción de efectivo o de existencias, bien por parte de empleados de la empresa o por personas ajenas a la organización, es algo que puede suceder, afectando a la liquidez de la empresa.
Este es un caso, por desgracia, común en muchas empresas en las que la gerencia no va de la mano al departamento de administración y sobre todo en el sector de la hostelería.
¿Cómo podemos limitar el riesgo ante este problema?
En primer lugar contando con un software adecuado a nuestra organización, que aunque esté controlado por nuestro departamento de administración, nosotros desde gerencia podamos seguir.
Por otro lado, llevando un control de stock exhaustivo con revisiones periódicas y asignado a un responsable.
Y por último pero muy importante, sobre todo en hostelería, llevando un buen orden y control sobre el flujo de efectivo siempre en función a nuestra previsión cobro-pago.
Sin embargo, si los pagos de este exceso de existencias se materializan antes de su venta, la liquidez de la empresa puede resentirse, y mucho.
“Una forma molt personal d’entendre les empreses i els emprenedors”
Llav@-neres
Assessoria i Gestió